Alberto Martínez Arias es el responsable de abandonar a los trabajadores de las Unidades Informativas en RNE a la suerte de una Dirección de Centros Territoriales que ni está ni se la espera, pero que sobre todas las cosas no cree en el producto RNE, y por tanto de abandonar la radio de proximidad, nuestra radio local. Por no saber no sabe ni en qué situación están la inmensa mayoría de los trabajadores de nuestras Unidades, porque le importa muy poco cuál sea su situación.

Alberto Martínez Arias ha abandonado a todos los trabajadores de los Centros territoriales en RNE, al avalar unas “sinergias” que en la práctica sólo sirven para poder tener a más trabajadores en los telediarios y en la programación nacional de TVE, despreciando el producto RNE y su valor público.

Ha colaborado activamente en el intento de cerrar la Onda Corta, y fue sólo la lucha de distintos colectivos, de los trabajadores y también de UGT, lo que se lo imposibilitó. Pero su rabia por haber perdido esa batalla dejó una emisión testimonial en Onda Corta, muy alejada de lo exigible al servicio público. También ha desmantelado Radio Exterior de España, eliminando programas emblemáticos del servicio público que eran referente para muchos compatriotas en el extranjero.

Alberto Martínez Arias ha montado una guardia pretoriana de “progres”, de esos que en vez de luchar como los compañeros de informativos en TVE han decidido esconderse tras sus puestos directivos. Una buena estrategia pensada por él, sabiendo que cuando dentro de unos meses caiga en desgracia sus amigos harán por él lo mismo que él hizo por ellos.

Alberto Martínez Arias ha conseguido un descredito en RNE desconocido hasta la fecha, superando con mucho a Ventero, lo cual no es fácil, con una programación manipulada y al servicio de los intereses del Gobierno y del Partido Popular, machacando con sus contertulios la información de los compañeros o vetándolas.
Alberto Martínez Arias permite y fomenta el acoso laboral a todo lo que huela a UGT desde hace tiempo, hasta el punto de que este sindicato va a interponer en breve una denuncia contra él por consentir un acoso laboral sostenido en el tiempo hacia una trabajadora, simplemente por ser de UGT.

Y es que desde la denuncia de UGT sobre el tratamiento de la información de Pedro Zerolo se ha quitado la careta, ha sacado su faceta desafiante, nerviosa y chulesca, y al más puro estilo del “padrino” ha comenzado una caza de brujas en RNE sobre todo lo que sea o le parezca UGT. El sabrá qué hizo ese día y por qué lo hizo, pero lo que tenemos muy claro en UGT es que lucharemos por la defensa de nuestra radio pública hasta el final, por encima de él y de todos los que la intenten hundir o debilitar. UGT va a defender a todos los trabajadores que se vean atacados por este personaje, y por supuesto a los compañeros que forman la familia de UGT en RNE. En los pocos meses que le quedan quiere abrir una guerra, y UGT le acepta el guante, pero le pedimos que sea valiente, que vaya a por quien da el visto bueno final a las acciones que hace UGT en RTVE y por tanto en RNE, que vaya a por su Secretario General, que gustosamente acepta el reto.

RNE no es el cortijo de nadie, RNE es de los ciudadanos, debe ser la plaza pública del encuentro, del debate, del diálogo y del análisis. La plaza donde entrelazar información con entretenimiento, diversión, cultura, deporte… RNE debe ser la radio de todos, querida por la ciudadanía, y jamás la radio en la que este personaje la está convirtiendo.